Por Chris Somerville
Tomado del fanzine APOYO a la venta en el Bazar de las Diosas o por internet http://www.dorisdorisdoris.com/zinecatag.html.
No siempre puedes escoger tus límites. Los limites tienden a establecerse solos y el trabajo que nos queda es retarlos suavemente cuando se pueda. Tenemos que ser honestos con nosotros mismos sobre lo que queremos, lo que estamos dispuestos a hacer y en lo que no estamos dispuestos a ceder. Estos son nuestros límites.
Basamos los límites en lo que sabemos que necesitamos, en el sexo y las relaciones, sin excepción. Naturalmente, mucho depende en el momento en que te encuentras. Los siguientes son ejemplos de algunos límites:
No me puedo involucrar con alguien que le gusta el sadomasoquismo porque sé que me puede volver a traumar.
Solo quiero tener relaciones con amigos íntimos, no puedo estar en una relación seria de pareja ahora.
La relación con mi pareja debe ser monógama porque me cuesta mucho tiempo, atención cuidadosa, y confianza poder crear una relación segura que me deja ser sexual, entonces permitir que otra persona se involucre seria una profanación.
Tengo que estar en una relación no-monógama porque cualquier limite que me imponen sobre mi vida o mi sexualidad me hace sentí atrapada y me recuerda el control dentro del abuso.
No puedo estar en una relación con otra persona que ha sobrevivido abuso sexual. Apenas puedo con mi vida, no puedo con la de otra persona.
Mi pareja tiene que ser una persona que ha sobrevivido abuso sexual, no tengo la energía para explicarle a otra persona sobre lo que me pasa si no han compartido la misma experiencia.
No puedo tener sexo con alguien del mismo género que la persona que abuso de mí.
Tus límites no tienen que ser tan blanco y negro como estos, tal vez no tienen que ser tan definidos, pero es una buena idea usar frases como “tiene que ser” y “no puede ser”. Tu poder personal dentro de tu sexualidad y tu relación de pareja se fortalecerá cuando decidas que es lo que necesitas, lo que estás dispuesto a hacer, y en que NO PUEDES ceder. Algunos de mis límites ahora son lo opuesto a lo que eran hace seis meses. Déjate ser flexible según cómo te sientes, pero a la vez, entiende y respeta lo que necesitas ahora porque de verdad lo necesitas AHORA.
No hay comentarios:
Publicar un comentario