viernes, 3 de septiembre de 2010

Las mujeres no somos ángeles, somos personas y sujetas de derechos







Por Beatriz Sotomayor

Hoy Jueves 2 de Septiembre 2010 fui a una charla dedicada al "Feminismo y el Movimiento de los Derechos Civiles: similitudes y diferencias" en la historia de EEUU, dada por William Chafe, totalmente valió la pena, aunque hubieron dos cosas que me molestaron:

William Chafe (foto), señalo que nosotras las mujeres por naturaleza somos más “morales y buenas” que los hombres. Al poco rato lo olvide la lección de historia fue memorable, pero ahora en la noche me vuelve a molestar.

A la hora de las preguntas debo decir que ninguno de los chilenos varones presentes mostro la hilacha, es mas hicieron preguntas que hasta mostraban estar informados del tema del feminismo, pero uno de los asistentes, un gringo joven, pregunto algo que me pateo el hígado: pregunto por la relación entre el feminismo y los problemas de la juventud diciendo que los niños no reciben suficiente atención y estimulación, y que esto después lleva a problemas sociales. ¿Es decir las mujeres salimos a la calle a realizarnos y los niños y el mundo se va al mismísimo demonio?

En fin, el gringo joven es un patudo, pues asume que las tareas de cuidado son responsabilidad exclusiva de las mujeres, ¿Patudo endilgarle las tareas de cuidado y exigirle sacrificios y deberes a la otra mitad de la humanidad sin pensar en que es lo que le toca a la mitad a la que uno pertenece?, ¿Patudo culpar al feminismo de los males de la sociedad?, absolutamente.


Un par de observaciones a la preguntita, ¿los niños de la familia pre-movimiento de las mujeres eran más felices?, ¿mejor estimulados?, ¿menos problemáticos?. Los derechos de los niños son bastante nuevos, además en familias que tenían una decena de niños el saberle a todos los nombres ya era más que suficiente, y sobretodo con la alta mortalidad infantil. Y no esta demás pensar en que la mitad de los niños nacidos en esa época (las niñas) no tenían ningún futuro, ninguna posibilidad de independencia, ninguna opción más que ser madre y esposa (si tenían suerte). ¿Que los niños estuvieran mejor? Discutible.

Otra observación ¿los niños y las niñas, son responsabilidad e interés puro y exclusivo de las mujeres?, pues eso es lo que la preguntita asume… Díganme si estoy equivocada, pero yo creía que la concepción no era fruto de la masturbación femenina, sino que había un hombre involucrado en el asuntito.


No todos los hombres piensan así, es mas hay un movimiento entre los hombres por la masculinidad equitativa que asume la paternidad como una responsabilidad, y como una dicha, que es tan importante para el hombre como para la guagua.


William Chafe como respuesta, señalo que normalmente los hijos de las feministas estaban mejor estimulados y cuidados que los de las personas más tradicionales (es decir las feministas no somos culpables porque no somos malas madres), y también señalo que la estimulación no necesariamente tenía que venir de la madre, sino que también podía ser provista por servicios de cuidado, como los jardines infantiles. Relaciono los problemas de la juventud con la falta de empleo, y que muchos hombres no se hacían cargo de sus hijos porque no podían encontrar trabajo.

Ahora mis rabiosas reflexiones:

La bondad: ¿Por que esto de la naturaleza angélica de nosotras las maravillosas mujeres me queda dando vueltas como una cosa que deje pasar a mi pesar? Porque el piropo no viene gratis, de hecho no son virtudes del alma femenina necesariamente el desapego y la bondad, el vivir para el amor es algo que nos viene por crianza y qué se nos exige “porque es parte de nuestra naturaleza”, el postergarnos es mandatorio. Si no somos desnaturalizadas.

Sobre la naturaleza de las mujeres, somos humanas, es decir tenemos todo el rango de conductas y sentimientos, podemos ser envidiosas, agresivas, antipáticas, o indiferentes, autocentradas, lejanas, frías, cálidas o amables, empáticas, cariñosas o todo lo anterior al mismo tiempo o en distintos momentos. No somos una figura de cartón de blanca nieves, tenemos profundidad, intereses propios (ajenos a hombres y niño/as) y contradicciones.

Y qué decir no somos ángeles, no existimos por la misión de cuidar, no flotamos alrededor de nadie vigilando su bienestar, y no tenemos por qué hacerlo, somos individuas éticas, pero nosotras podemos elegir nuestro camino y nuestros deberes y nuestras metas, podemos no permitir que la gente necesitada de servicios domésticos y/o emocionales, nos imponga deberes, después de todo moriremos como todo lo vivo y merecemos poder disponer de nuestro viaje en este mundo, nuestra vida y nuestro cuerpo.

Como desde el supuesto de la bondad inherente y el instinto maternal, somos ángeles de amor que nos realizamos en el sacrificio y la entrega, la otra mitad de la humanidad puede despreocuparse tranquilamente de las tareas de cuidado e incluso de cuidar de sí mismos, porque para eso estamos nosotras la costilla bondadosa que para la olla y cuida de los niños y si la mujer no da la talla, es porque no es lo suficientemente buena.

Es decir la mujer abnegada y sacrificada, cosa que se exige y que incluso las mismas mujeres (ver junji) les exigen a otras mujeres, es un animal de carga glorificado y si es madre soltera y de clase baja, animal de carga a secas, vaca lechera que se puede ordeñar sin preocuparse de alimentarla.

Ahora en nuestro muy católico Chile, donde se trabaja mejor al alero de la virgen, se espera de las mujeres muchas cosas, se les imponen muchas cosas, y se las mira como si fueran una moneda con dos caras, el hada o la bruja, sin términos medios, sin matices y sin ninguna atención a la realidad, y sin ofrecerles nada de apoyo.

Con esto no quiero decir que todas y todos, no debamos ser amables y preocuparnos del projimo y la projima y del planeta, y que no deban cuidar de los niños y niñas, es mas un mundo sin gentileza es invivible, lo que digo es que el cuidado no es responsabilidad de la mitad de la humanidad, es de toda la humanidad, no se quien decia que a los niños los cria la comunidad, pero asi es, para bien y para mal.

Aclaraciones:

- No creo que ser madre sea abusivo, denigrante o esclavizante hacia la mujer, o que sea raro o loco desearlo, mi punto es que el peso del mundo no descanse en hombros de las mujeres en un arreglo imposible donde tengan casi toda la responsabilidad y casi nada del poder.

- Mi punto de vista es que las mujeres tienen derecho a salir al mundo, viajar, trabajar, competir o a ser hogareñas, si es lo que desean, como la ilustración mas abajo muestra un individuo que sale a dejar su marca y que tiene libertad.

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